Se pueden reducir las calorías y aumentar los nutrientes, a la vez que disminuimos la sensación de hambre si elegimos alimentos saludables, bajos en calorías, ricos en vitaminas, minerales, fibra dietética y proteínas, estos dos últimos componentes de la dieta son los que van a brindar una mayor satisfacción evitando el hambre o la ansiedad.
Entre los alimentos más saciantes se encuentran las verduras frescas, que están llenas de vitaminas, minerales y antioxidantes, pero además su elevado contenido en fibra y agua, se encargará de brindarnos una mayor plenitud.
Adicionalmente las dietas altas en fibra pueden prevenir el estreñimiento y reducir el riesgo de enfermedad cardíaca.
Vegetales como la alcachofa tiene aproximadamente 6,5 g de fibra dietética, las espinacas y las coles de Bruselas tiene menos 3 g por porción, así como los pimientos rojos y verdes, el brócoli, la coliflor, las zanahorias, las espinacas y la col rizada, tienen además cada uno aproximadamente la mitad de la vitamina A que se necesita por día y menos de 50 calorías por porción.
Las frutas son una excelente fuente de vitaminas, minerales y fibra dietética, por ejemplo la pera asiática tiene alrededor de 51 calorías y 4,4 g de fibra y media taza de frambuesas tiene 32 calorías y 4 g de fibra. Las naranjas, kiwis, fresas y guayaba son ejemplos de frutas con menos de 70 calorías por porción y por lo menos ofrecen las tres cuartas partes del valor diario de vitamina C, la vitamina de las defensas orgánicas.
El yogur es un alimento probiotico muy saludable y rico en proteínas, las cuales son consideradas como macronutrientes que brindan mayor saciedad que los demás grupos nutricionales, conteniendo alrededor del 26 por ciento del valor diario recomendado de proteína (en 200 grs) y el 45 por ciento del valor diario de calcio, mineral que junto con la proteína suman un gran valor saciante para luchar contra el hambre.