La pera es una fruta que posee numerosos beneficios para nuestra salud y que por tanto podría aplicarse de forma terapéutica en varias enfermedades.
No obstante, los beneficios de las peras para el ácido úrico son muy notables, y para entender cómo esta fruta realiza su acción beneficiosa, antes veremos en qué consiste exactamente esta enfermedad.
La enfermedad de la gota es una enfermedad cuyas causas se relacionan directamente con la alimentación. El exceso de ácido úrico que caracteriza a esta patología se debe a un consumo excesivo de carnes y mariscos.
Al metabolizar las proteínas se produce amoníaco, que posteriormente es transformado en urea y ésta se expulsa por la orina.
Si el consumo de proteínas es excesivo, la urea no se elimina completamente y forma cristales de ácido úrico. Estos cristales se clavan en las articulares y provocan una gran inflamación y dolor, siendo éste el síntoma principal de la enfermedad.
Las peras contienen más de un 83 % de agua, un 15 % de carbohidratos y un 2,4 % de fibra.
De su composición en vitaminas y minerales podemos destacar la presencia de potasio, que es imprescindible para eliminar toxinas y el contenido en vitamina B9 o ácido fólico, que nos va a resultar muy útil en este caso.
Al tener una gran proporción de agua, contener potasio y unos niveles nulos de sodio, realizan un efecto diurético y permiten aumentar la producción de orina, excretando así un mayor número de toxinas.
Este hecho por sí solo ya es muy importante para equilibrar los niveles de ácido úrico, pero además, su contenido en vitamina B9 actúa eficazmente en casos de gota disminuyendo las concentraciones de urea y ácido úrico.
Podemos concluir que la composición nutricional de la pera resulta muy efectiva contra el ácido úrico, además de aportarnos todas las ventajas y cualidades de las frutas en general.