Existen muchos factores que inciden sobre la salud de la piel durante el embarazo, donde también se incluyen los genéticos y por supuesto el estilo de vida donde intervienen la alimentación y las condiciones ambientales (contaminación de las ciudades), pero dichos cambios pueden apalearse con una dieta adecuada tanto para él bebe como para la futura mama y con tratamientos externos preferentemente naturales, en los cuales el uso de aceite de rosa mosqueta es uno de los más indicados desde la medicina natural, pero siempre con la aprobación de un especialista por supuesto.
El aceite de rosa mosqueta es un emoliente natural que beneficia la salud de la piel y que se extrae de las semillas de la variedad de rosas conocida como Mosqueta, con la cual se elaboran en la actualidad un sin número der productos para la belleza, ya que además de restablecer la belleza de la piel en cuanto a su textura, representa un verdadero tónico nutritivo que es capaz de disminuir la formación de tejido cicatricial, incrementar el tono de la piel y evitar la sequedad.
Para el embarazo, el aceite de rosa mosqueta se emplea para reducir la hiperpigmentación y las estrías, evitando el resecaminento de la misma, cuya efectividad se encuentra avalada por distintos estudios, entre los cuales uno llevado a cabo en la Facultad de Química y Farmacología de la Universidad de Chile, demostró que la aplicación diaria de aceite de rosa mosqueta se relacionó con la reducción de arrugas y la decoloración de la piel dañada por el sol.
Durante el embarazo a medida que el bebé crece, la piel se estira y suelen hacer su aparición manchas y estrías, que el aceite de rosa de rosa mosqueta puede prevenir, al incrementar la capacidad natural del órgano para producir células dérmicas que reemplazaran a las células oscurecidas, aclarando la zona afectada.