La hipertensión arterial es uno de los factores de riesgo de accidente cardiovascular. Si no se controla a tiempo, provoca la pérdida de flexibilidad en los vasos sanguíneos o arteriosclerosis.
La medicación posee efectos secundarios, y puede evitarse si el problema se detecta a tiempo con una dieta pobre en sodio así como incorporando a la dieta habitual una serie de alimentos que ayudan a tratar la hipertensión.
Muchos de los alimentos que permiten controlar la hipertensión son ricos en potasio, catión antagonista al sodio en muchos procesos del organismo. No obstante, tanto sodio como potasio son imprescindibles para la vida y la sal no debe ser suprimida por completo de las comidas salvo que lo indique el médico.
Algunos de los alimentos más ricos en potasio son las algas comestibles. Todas ellas permiten controlar la hipertensión arterial por contener muchísimo más potasio que el sodio que pudiera resultar de no desalarlas correctamente. Ya entre los alimentos terrestres, se puede controlar la hipertensión arterial con una dieta rica en plátanos, dátiles, melón y sandía.
En general, todos los alimentos diuréticos ayudan a controlar la hipertensión al favorecer la excreción de sales minerales, entre ellas el sodio, por la orina. Así, además de los citados melones y sandías, se recomienda consumir espárragos, tomates y, en general, todo tipo de verduras. El tomate tiene el aliciente adicional de ser fuente de antioxidantes y de licopeno, y proteger por ello de accidentes cardiovasculares, la principal complicación de la hipertensión.
Otro alimento muy recomendado para reducir la tensión arterial es el ajo, el cual a su vez reduce los niveles de glucosa en sangre. Los beneficios del ajo se aprovechan tanto si se toma de la forma convencional como si se hace en forma de cápsulas o comprimidos. La ventaja en este último caso está en que se evitan los problemas de halitosis que suele producir el consumo de ajo.
No olvidemos que la actividad física, una camita, bicicleta, ejercicios livianos, suamado a 2 litros de agua por día son también un factor importante en el control de la hipertensión.