El Dong Quai es el nombre chino que se le da a la Angélica Sinensis y se le atribuye desde la antigüedad la facultad de prolongar la vida, similar a las virtudes que los orientales le atribuyen a su venerada raíz de ginseng (los curanderos chinos lo consideran el equivalente femenino del ginseng).
El Dong Quai ha sido utilizado en China desde hace siglos, atribuyéndole poderes notables para nutrir las glándulas, reconstruir la sangre y ayudar a retrasar los síntomas de la vejez en las mujeres, considerándose la raíz de mejor calidad aquella que tenga un fuerte aroma y sabor picante, a diferencia del Dong Quai de Corea que es muy suave y se puede tomar con más frecuencia durante el día.
Las distintas partes de la raíz de Dong Quai tienen diferentes efectos sobre la salud, así las caderas de la raíz hasta la cabeza son de uso general, pero la mitad superior se considera un gran constructor de la sangre. Las colas de la raíz se utilizan solo bajo la dirección de herbolarios chinos para casos de emergencia solamente, ya que es capaz de disolver los coágulos de sangre como consecuencia de accidentes graves y para expulsar la placenta cuando es difícil de llevarse a cabo.
La raíz de Dong Quai tiene a la sangre en movimiento y es una de las principales propiedades de la planta, pero además la tonifica siendo un excelente emenagogo, laxante, sedante, analgésico, tónico, diaforético y antiespasmódico, por su contenido en alcoholes, cadineno, caroteno, carvacrol, isosafrol, safrol, sesquierpenes, sacarosa y vitaminas A, B12, y E.
El Dong Quai es una hierba medicinal de uso múltiple para una amplia variedad de patologías femeninas como por ejemplo los relacionados a la menopausia, sofocos, síndrome premenstrual y la sequedad vaginal, además de ayudar a reanudar la menstruación normal, aumentando el efecto de las hormonas ováricas / testiculares, por ello es considerada también como el Viagra oriental.