Todas las células requieren la intervención de cationes de sodio y de cationes de potasio para poder intercambiar agua con el medio, mediante la llamada bomba de sodio-potasio. Pasando del nivel microscópico a la evaluación de las funciones del potasio en el organismo, debe recalcarse la importancia de que ambos iones, de sodio y el potasio, se encuentren en un justo equilibrio.
El motivo por el que suele relacionarse el potasio con la salud y el sodio con algunas enfermedades radica en la alimentación, que suele aportar grandes cantidades de sodio mediante alimentos en conservas, salazones o precocinados. También hay personas que requieren un mayor aporte de sodio que de potasio y de nuevo la razón suele estar en la dieta (es el caso de las personas con marcada hipotensión arterial o con problemas de deshidratación).
El potasio actúa como diurético, ayudando al organismo a eliminar líquidos, en
especial por la orina. Con los líquidos se eliminan toxinas por el funcionamiento del organismo, bien sea
por la orina, bien sea mediante el sudor.
Sin embargo, ante una deshidratación no sólo conviene aportar sodio para frenar la pérdida de
líquidos, sino también potasio. Los niveles demasiado bajos de alguno de estos dos iones pueden
acarrear la muerte por fallo cardiaco.
Al favorecer la pérdida del agua retenida entre las células, el potasio ayuda a combatir edemas e incluso mejora los problemas de celulitis. A la vez disminuye los niveles de presión arterial y este es el motivo por el cual, en el tratamiento de la hipertensión se recomienda sustituir en su totalidad o de manera parcial el cloruro sódico o sal común de mesa por el cloruro potásico.
El potasio, de nuevo en combinación con su antagonista el sodio, está implicado en la transmisión de los impulsos nerviosos al crear un potencial a través de las membranas de las células nerviosas.
Uno de los síntomas más habituales de la carencia de potasio son los calambres musculares frecuentes, aunque también pueden indicar carencia de sodio o de magnesio.
En resumen, los beneficios del potasio para la salud pasan por un óptimo equilibrio con su antagonista, el sodio.