Las moras o zarzamoras son los deliciosos frutos de un arbusto, muy apreciados en repostería por ser la manera tradicional de conservar las virtudes de una baya perecedera pero a la vez tan interesante por las propiedades medicinales debidas a algunas de las sustancias que contienen.
Los beneficios de las moras desde el punto de vista nutricional se encuentran íntimamente relacionados con su elevado contenido en vitaminas A y C, de propiedades antioxidantes pero también imprescindibles para prevenir infecciones, en especial las del tracto respiratorio, así como para ralentizar el avance de algunas enfermedades de la visión, en especial las de tipo degenerativo.
Por sus propiedades antioxidantes, la moras presentan también propiedades antienvejecimiento y preventivas frente a ciertos tipo de tumores.
Las propiedades medicinales de las zarzamoras relacionadas con su acción antioxidante no se deben tan sólo a su aporte en las vitaminas A y C, sino sobre todo a su elevado contenido en flavonoides.
Los flavonoides son otro tipo de antioxidantes de mayor interés medicinal, presentes en otras sustancias vegetales como el té verde. Los flavonoides protegen las células de los daños ambientales ocasionados por radiaciones y/o contaminantes de tipo acumulativo, pero también ejercer una acción preventiva frente a accidentes cardiovasculares al ayudar a mantener bajos los niveles de colesterol LDL (colesterol malo), e incluso tienen un ligero efecto antiinflamatorio útil en enfermedades articulares.
La mejor manera de aprovechar los beneficios de las moras para la salud es consumirlas frescas, pero como esto no es posible durante todo el año, también se puede recurrir a los comprimidos con liofilizado, a las confituras y mermeladas o, si se ha empleado ultracongelación, a las bayas congeladas.