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Versión para imprimir del artículo El Perejil protege al Corazón y lucha contra la Artritis. No incluye formatos especiales ni imágenes.
La vitamina C contenida en el perejil es más abundante que la contenida en los cítricos y representa un poderoso antioxidante natural y potente agente antinflamatorio, lo que explicaría su utilidad en la prevención de enfermedades como la osteoartritis y la artritis reumatoide, además de potenciar el sistema inmune e intervenir también en la prevención de las infecciones recurrentes como las del oído o los resfriados.
El beta-caroteno es otro antioxidante muy importante que actúa sobre las áreas solubles en la grasa del cuerpo, y por ello las dietas a base de alimentos ricos en este compuesto también están asociadas con un menor riesgo para el desarrollo y la progresión de enfermedades como la aterosclerosis, la diabetes y el cáncer de colon. El beta-caroteno se convierte en el hígado en vitamina A, un nutriente tan importante para el sistema inmune, que recibe el nombre de la “vitamina anti-infecciosa”.
El perejil es una buena fuente de ácido fólico o vitaminas B9, que juega varios roles saludables en el organismo, siendo una de sus funciones más importantes su relación con la salud cardiovascular, ya que es necesaria su participación en el proceso a través del cual el cuerpo convierte la homocisteína en moléculas benignas.
La homocisteína es una molécula potencialmente peligrosa cuando sus niveles se exceden y pueden dañar directamente los vasos sanguíneos y por lo tanto aumentar significativamente el riesgo de ataque cardíaco o accidente cerebrovascular en personas con aterosclerosis o enfermedad cardíaca diabética. Por ello disfrutar de los alimentos ricos en ácido fólico como el perejil es una de las mejores opciones para las personas que tienen o desean prevenir enfermedades cardiovasculares.
Para tener en cuenta; el ácido fólico también es un nutriente esencial para que se lleve a cabo la división celular apropiada y por lo tanto es de vital importancia para la prevención del cáncer, principalmente en dos áreas del cuerpo que contienen células de división rápida, el colon y el cuello uterino en las mujeres.
