Ciertos alimentos estimulan la producción de la hormona masculina o testosterona y esta se traduce en la base de la virilidad masculina. Este tipo de alimentos específicos son ricos en nutrientes tales como la vitamina B y el zinc, siendo la primera un complejo vitamínico que cuenta variedad donde se incluyen; B1, B6, B12, niacina y ácido fólico, todas estimuladoras de la producción de testosterona.
Los alimentos ricos en vitamina B son los cereales integrales, pescado, mariscos, carne, huevos, aguacate, frijoles, guisantes, productos lácteos y verduras de hoja verde.
En el caso del zinc, un mineral esencial para la virilidad masculina, los alimentos que lo incluyen en altos niveles son; las ostras crudas, como las mejores opciones dietéticas del mineral, ya que proporciona aproximadamente 77 miligramos de zinc por porción. Los alimentos adicionales ricos en zinc son; las carnes, legumbres, frutos secos y leche, además de los cereales para el desayuno fortificados.
Cuando se desea aumentar la producción de testosterona a través de la dieta, existen alimentos que pueden inhibir su producción y por ello deben ser evitados, un ejemplo son aquellos ricos en proteínas, ya que comer demasiada proteína puede aumentar la cantidad de testosterona excretada en la orina y por lo tanto perdida de la misma.
Para controlar la ingesta de proteínas se debe tener como objetivo consumir aproximadamente 0,8 a 1 gramo de proteína por kilo de peso corporal y además evitar el consumo de cantidades excesivas de grasa, fibra y alcohol, en este último caso lo ideal es una o dos bebidas por semana, si no se pueden eliminar por completo.
Para tener en cuenta: En el caso de que las pruebas de laboratorio determinen la existencia de niveles bajos de testosterona, se deberá evaluar opciones de tratamiento a seguir con el profesional de confianza, ya que además de los alimentos específicos que actúan naturalmente, hay otras opciones disponibles (suplementos transdermicos) para casos que revistan gravedad.