El uso del magnesio para calmar el dolor óseo se ha disparado últimamente. Esto no es gratuito, es porque el magnesio verdaderamente ha demostrado su eficacia frente al dolor óseo y articular.
Es importante destacar que no se trata de una sustancia milagrosa capaz de curarlo todo pero sí es cierto que puede disminuir de forma importante el dolor óseo y articular, especialmente en aquellos casos crónicos, dónde resulta muy útil al tratarse de una sustancia natural y no medicamentosa.
El magnesio es una sustancia de origen mineral y en nuestro organismo representa un oligoelemento: esto quiere decir que es una sustancia que se encuentra en una mínima cantidad pero que es necesaria para llevar a cabo reacciones muy importantes.
En el dolor óseo y articular el magnesio actúa de la siguiente manera: de una parte permite que la remodelación ósea se lleve a cabo de una forma adecuada (se trata de un proceso imprescindible para unos huesos sanos) y permite que el calcio se deposite en huesos y dientes. De otra parte evita las calcificaciones en las articulaciones, que de producirse, son muy dolorosas y pueden agravar enormemente un cuadro de artrosis ya diagnosticada.
La forma más saludable de tomar magnesio es a través de la alimentación. Estos son los alimentos ricos en magnesio: levadura de cerveza, chocolate en polvo, frutos secos, legumbres, cereales, frutas, verduras, hortalizas y leche.
No obstante, ciertos casos como el dolor articular crónico requieren una complementación nutricional. En este caso se recomienda un complemento de aproximadamente 300 miligramos de magnesio. Debemos recordar que la cantidad diaria recomendada es de 150 a 500 miligramos, por lo que a pesar de tomar un complemento es indispensable seguir tomando alimentos que contengan este mineral.
Sí. El magnesio está contraindicado en aquellas personas que padezcan de diarrea o bien de insuficiencia renal. Si la persona sigue tratamiento farmacológico, antes de tomar magnesio para el dolor de huesos es muy importante que lo comunique con su médico ya que el magnesio puede interaccionar con algunas sustancias.