Las hojas de albahaca fresca tienen la capacidad de ayudar a prevenir los brotes de acné y acelerar la curación de sus lesiones, así como el aceite que se obtiene de ellas elimina las bacterias de la piel que contribuyen a obstruir los poros y así estimular a la producción de acné.
La albahaca fresca es una hierba aromática y como tal se utiliza para tratamientos aromoterapicos, ya que sus potentes aceites esenciales actúan a nivel pulmonar ayudando a descongestionar y eliminar flemas en las distintas enfermedades respiratorias, incluida el asma.
El aroma de la albahaca fresca puede ayudar a aliviar la tristeza, fatiga y falta de claridad mental asociadas con la depresión.
Un remedio antiguo elaborado a
partir de la combinación de albahaca fresca con aceite de oliva, se utiliza para
el tratamiento natural de la depresión,
por lo tanto sus efectos saludables se extienden al nivel emocional.
Otro beneficio saludable de las hojas de albahaca frescas es que puede mejorar
la función del sistema inmunológico,
ya que los compuestos químicos que contiene mejoran la producción de anticuerpos que combaten la infección en
hasta un 20 por ciento, así como también pueden ayudar a destruir las células virales que causan la gripe y el resfriado común.
La albahaca fresca a diferencia de otras hierbas medicinales ofrece beneficios más fuertes que en estado seco, ya que el proceso de deshidratación destruye algunos de los compuestos químicos y aceites volátiles que le brindan sus propiedades medicinales.
La albahaca se ha utilizado en remedios populares prácticamente en
todas la medicinas tradicionales del mundo como un inductor o estimulante del trabajo
de parto, pero como hierba seca, ya que no existe el compuesto estimulante uterino en las hojas
frescas.
Debiendo a esto hay que tener en cuenta que durante el embarazo es peligroso su consumo ya que
es abortiva. por ello en la actualidad la medicina alopática previene sobre sus
riesgos en este caso particular.