Los dos beneficios populares para los que sirve el ácido fólico son: la de activo antianémico y la de prevención de la espina bífida en neonatos.
Efectivamente, la vitamina B9 está implicada en los procesos de división celular, con mayor peso si cabe en los relativos a la formación de glóbulos rojos o eritrocitos. Por ello el ácido fólico es habitual en los tratamientos antianémicos, estando su carencia asociada a las formas más severas de anemia, como la megaloblástica.
El ácido fólico también sirve para las embarazadas, especialmente en los meses cuarto y quinto, cuando es habitual que la mujer gestante presente una ligera anemia.
Sin dejar el tema del embarazo, se ha demostrado que la ingesta adecuada de vitamina B9 es el método más eficaz para prevenir la espina bífida, una malformación que sucede durante la formación del primero embrión y luego feto, incurable y que puede tener serias consecuencias ( todo depende del grado ).
Pero las propiedades medicinales del ácido fólico van más allá, pues esta vitamina interviene en la replicación del ADN durante la mitosis celular. Los niveles bajos de esta vitamina durante periodos de tiempo prolongados se relacionan con una mayor incidencia de cáncer de colon.
En niños, la carencia de vitamina B9 puede manifestarse con retrasos en el crecimiento. Tanto en niños como en adultos, otras señales de alerta pueden ser la excesiva somnolencia y la fatiga intensa propias de la anemia, los dolores de cabeza o, incluso, la presencia temprana de canas.
Al ser la ácido fólico hidrosoluble no existe riesgo de hipervitaminosis, pues el exceso se elimina por la orina. Pero por ese mismo motivo se requiere un aporte regular y continuado del ácido fólico, bien con la alimentación adecuada, bien con suplementos de ácido fólico.
Ahora ya sabemos para que sirve el ácido fólico y que no hay riesgos de sobredosis.