Para las madres primerizas la lactancia además de ser una experiencia de vinculación íntima con su bebé, saben que le brindan todo lo necesario para que se desarrolle fuerte y sano, sin embargo en el proceso pueden producirse infecciones dolorosas, que reciben el nombre de mastitis.
Qué es la Mastitis, síntomas y
tratamiento
La mastitis es una inflamación de las mamas provocada por una bacteria que requiere de un tratamiento antibiótico, no debiendo
confundirse con la obstrucción o congestión de los conductos mamilares. Su aparición es típica durante el proceso de
la lactancia, aunque puede manifestarse también en otros casos no relacionados.
Las bacterias
puede infectar los conductos de la leche y las glándulas, e introducirse por la
nariz o la boca del bebé, siendo el
momento más común de su aparición durante el primer mes de lactancia y se manifiesta por lo general solo en uno
de los senos, pudiendo causar síntomas parecidos a la gripe como, dolor, hinchazón, enrojecimiento, fiebre alta y escalofríos.
Tratamientos a base de hierbas medicinales para
acelerar la cura de la Mastitis
- Consuelda y Caléndula: un tratamiento
de la medicina natural para la
mastitis, es la aplicación de una cataplasma elaborada con hojas de consuelda y flores de caléndula, que deberá colocarse
tibia sobre la mama afectada, por lo menos cuatro veces al día.
Las propiedades antiinflamatorias y
antisépticas naturales de estas dos hierbas medicinales, se potencian entre
sí, brindando excelentes resultados en poco tiempo, calmando el dolor y
eliminando la infección.
- Raíz de la equinácea: esta
planta posee un gran número de aplicaciones para la salud, pero puntalmente sus
efectos se centralizan en la estimulación
natural de las defensas orgánicas, siendo muy apreciada por sus propiedades antibióticas naturales, que
lo indios americanos utilizaban para tratar la gripe y en el caso de la mastitis es muy efectiva. Su
dosificación debe realizarla un profesional.
- Pulsatilla: sus
propiedades favorecen la desinflamación
de los pezones doloridos, pero a su vez cumple una función emocional, porque
puede elevar el estado de ánimo en la madre, situación que suele ser muy
perjudicial.
- Tomillo: el tomillo es una
de las plantas antibacterianas más
potentes de la naturaleza y por lo tanto puede eliminar infecciones, pudiendo consumirse en forma de té internamente
y usarse de forma tópica a modo de cataplasma externamente.
Un consejo final para cuidar la salud
Es importante
que ante la aparición del mínimo dolor se proceda a aplicar un tratamiento para
evitar llegar a un gran proceso infeccioso, que puede perjudicar tanto la salud de la madre como a la de su hijo.