Las heridas causadas por las úlceras generalmente se rodean de tejido inflamado, por ello evitar ciertos alimentos que estimulen el proceso inflamatorio y el dolor asociado a esta condición ayuda a sobrellevar sus síntomas y acelerar la curación.
Entre los alimentos a evitar cuando se atraviesa por una condición ulcerosa a nivel estomacal o duodenal son los siguientes:
Las carnes grasas como; la carne de res, cerdo y pollo oscuro son altas en grasas saturadas, por lo tanto son difíciles de digerir, pero además son ricas en purinas productoras de acidez, por lo tanto estimulan la producción adicional de los ácidos en el estómago, particularmente el ácido clorhídrico, que en exceso irrita las úlceras pépticas aumentando el dolor y las náuseas, así como el peligro de sangrado.
Los azucares y harinas refinadas se encuentran entre los alimentos que mayor producción de ácidos estomacales producen, entre ellos las rosquillas, galletas saladas, cereales envasados, productos de panadería, dulces y refrescos, todos deberán ser evitados en los casos de úlcera.
La mejor opción ante una ulcera insipiente o declarada es eliminar los azúcares de la dieta y optar por los productos de granos enteros en el lugar de los elaborados con harina blanca, ya que los cereales integrales contienen fibra dietética y ésta mejora la digestión disminuyendo la producción de ácido a nivel estomacal.
Los alimentos fritos como las papas fritas, aros de cebolla y pollo frito, se elaboran con grasas trans de forma industrial, ya que este tipo de grasa es la más conveniente para la producción masiva, debido a su durabilidad, haciendo su rendimiento mucho mayor que otros tipos de grasas naturales, situación que se traduce en beneficios económicos, pero no para la salud.
Al igual que las grasas saturadas, las grasas trans requieren una mayor producción de ácido estomacal para ser digeridas, por lo cual los alimentos elaborados con ella deberán ser evitados si se tiene úlcera y también si no se quiere desarrollarlas.