La alcachofa o Alcaucil es una planta con múltiples propiedades y muy depuradora, si bien su beneficio más conocido es el de coadyuvante en las dietas bajas en calorias tiene otros de gran interés. Entre ellos, tiene la capacidad de regular el tránsito intestinal, una afección muy común en los tiempos actuales debida a la mala alimentación y al estrés diario que empeora con la toma de laxantes ya que éstos privan a nuestro intestino de trabajar por él mismo.
La alcachofa posee sustancias que tratan esta alteración
completamente, estas sustancias son los mucílagos y la inulina.
Los mucílagos
aumentan el volumen fecal y facilitan la evacuación del colon, siendo útiles
tanto en casos de estreñimiento como
de diarrea, la inulina sufre una
fermentación en nuestro organismo que genera más flora intestinal, la
responsable de mantener equilibrado el
tránsito intestinal.
La alcachofa a diferencia de cualquier laxante estimula la fisiología natural de nuestro cuerpo en vez de hacer el trabajo por él o irritar la mucosa intestinal.
Para poder beneficiarse de estas propiedades de la alcachofa es importante tener en cuenta el tratamiento culinario que le damos, ya que la alcachofa cuando se hierve pierde gran parte de estas propiedades y es importante conservar el caldo restante para incluirlo en la comida, comerla a la plancha o al horno son las mejores opciones.