En un organismo sano, la glucosa (el azúcar que nuestro organismo obtiene a través de los hidratos de carbono y azúcares rápidos) es absorbida correctamente gracias a la acción de la hormona insulina y pasa a disposición celular para poder ser utilizada y almacenada creando así reservas de glucógeno.
Durante el embarazo, debido a los múltiples cambios hormonales, algunas mujeres padecen lo que se llama diabetes gestacional. La diabetes gestacional es una alteración reversible del organismo que sólo afecta a la mujer durante el embarazo.
El cuerpo sufre una especie de intolerancia a la glucosa y en vez de gestionarla correctamente le es imposible absorberla completamente, el resultado de esto es que los niveles de glucosa en sangre se elevan por encima de lo que se considera normal (60-100 mg./dl.).
Para controlar este nuevo estado del organismo no será suficiente sólo con incluir en la dieta alimentos con fibra sino que se deberán restringir o moderar aquellos alimentos que nos aporten azúcares rápidos (tales como zumos, frutas, azúcar de mesa, dulces, chocolate, bollería... etc.).
Pero el cuerpo no sólo obtiene glucosa de estos alimentos sino también de los cereales más complejos como el trigo o el arroz y del pan.
Para que la absorción de la glucosa que proviene de los hidratos de carbono lentos sea la mejor posible durante la diabetes gestacional, es necesario introducir en cada comida principal alimentos con fibra.
Los alimentos con fibra son imprescindibles para un buen control de la diabetes gestacional, los siguientes alimentos son los más recomendados: