La artritis es un término general que se aplica a un grupo de enfermedades crónicas, las cuales se caracterizan por una inflamación dolorosa y limitante del movimiento que puede llegar a ser invalidante, característica en los adultos mayores y si bien no existe una cura, es tratable con medicamentos, terapia física, ejercicio adecuado y una dieta adecuada en su conjunto ayudan a mejorar sus síntomas y promover una mejor calidad de vida en general sobre su cronicidad.
La dieta por lo tanto ejerce un efecto ambiguo, ya que ciertos alimentos son beneficiosos para sobrellevar la condición pero otros la agravan, aquí les brindamos algunos de los alimentos que pueden empeorar la condición artrítica, ellos son;
Si bien la carne es un alimento que proporciona cantidades valiosas de proteínas y micronutrientes, como la vitamina B, hierro y zinc, sin embargo su consumo en cantidades excesivas puede empeorar sus síntomas de artritis, particularmente las que poseen un alto contenido de grasas saturadas, como es el caso de las carnes rojas de res, cordero, salchichas y carne de aves de corral oscuro, las cuales a su vez están relacionadas con la presión arterial alta y enfermedades del corazón, ambas condiciones que incrementan su riesgo en personas con artritis.
Se recomienda a las personas con artritis reducir el consumo de carnes rojas o reemplazarlas por las blancas como las del pescado y optar por fuentes de proteínas de origen vegetal como los frijoles, las lentejas, tofu y las nueces.
La harina refinada que prevalece en los panes enriquecidos, pastas, cereales y productos de panadería, proporcionan menos fibra y menos nutrientes, comparada con la del tipo integral u obtenida de los granos enteros. Las harinas blancas o refinadas se digieren de forma menos eficiente y pueden descompensar los niveles de azúcar en la sangre así como los humores, incrementando por lo tanto los procesos inflamatorios, por ello se recomienda a los pacientes artríticos reemplazarla por las del tipo integral, más ricas en fibra y nutrientes que benefician los distintos niveles de la salud.
Verduras como las papas blancas, pimientos, berenjenas y tomates, aunque nutritivos son ricos en alcaloides, sustancias que pueden afectar la función articular en algunas personas, por ello se recomienda su eliminación de la dieta para reducir la inflamación y el dolor en las articulaciones. Las verduras mencionadas pueden reemplazarse por alimentos ricos en antioxidantes, como las bayas, hojas verdes y las zanahorias.