Menopausia se denomina a la última menstruación en la vida de la mujer, mientras climaterio es el periodo de tiempo que precede, acompaña y a veces se posterga a esa última menstruación.
Una de las mayores quejas de las mujeres en edad de tener la menopausia es la de los cambios de humor. Para tratar los problemas nerviosos asociados a este proceso se pueden aprovechar las virtudes de cualquier planta de propiedades ansiolíticas como la valeriana o la pasiflora.
Al dejar de producir estrógenos de manera natural, la mujer pasa a ser propensa a desarrollar enfermedades como la osteoporosis y problemas de corazón. Además se tiende a ganar peso.
Para prevenir estas dolencias conviene incorporar soja a la dieta. En realidad es conveniente incorporarla antes de esta edad.
La soja aporta fitoestrógenos, una molécula similar a los estrógenos humanos, y por ello reduce problemas como los sofocos, la retención de líquidos y la sequedad vaginal asociada a causas hormonales.
Además el aporte de calcio de la soja contribuye a la prevención de la osteoporosis, mientras sus ácidos grasos esenciales mantienen los niveles correctos de colesterol LDL ( el llamado “colesterol malo” ).
En ocasiones, con el climaterio y el incremento de peso comienzan los problemas de hipertensión. En estos casos el espino albar puede ser una gran ayuda, pues a la vez que regula la tensión arterial controla el nerviosismo.
Si la nueva etapa en la vida de la mujer fuera acompañada de depresión, se puede recurrir al hipérico como antidepresivo siempre y cuando no se tomen a la vez antidepresivos sintéticos.
Se recomiendan incluir en la dieta productos con propiedades antioxidantes, vitamina E y vitamina A para prevenir las enfermedades degenerativas y mantener la salud de la piel, ya que durante el climaterio y en la menopausia se volverá mucho más seca y desprotegida.