La Guayaba (Psidium guayava), también conocida como “Goiaba” en Brasil, es un árbol de sombra o arbusto común en los jardines de los trópicos y sus frutos son consumidos naturalmente frescos, en bebidas, helados y conservas.
Los frutos de la Guayaba contienen numerosas semillas y es conocida por ser una de las plantas terapéuticas más populares en las Filipinas, donde las propiedades medicinales de la Guayaba se aplican como antiséptico, astringente y antihelmíntico, ya que mata las bacterias, hongos y amebas, así como las hojas frescas de la planta se utilizan para facilitar la curación de heridas y cortes, además de anestésico dental, ya que trata el dolor de muelas.
Los indios del Amazonas utilizan las hojas o la corteza de la guayaba como una cura eficaz para la diarrea, en infusión o decocción los indios también la emplean para tratar el dolor de garganta, vómitos, problemas estomacales, para el vértigo y para regular los periodos menstruales.
Los beneficios para la salud de la Guayaba son realmente importantes, en particular por su riqueza en quercetina, un antioxidante que posee la capacidad de bloquear las enzimas responsables de la construcción de sorbitol, el azúcar que forma los grupos y nubes blancas de las cataratas, una enfermedad degenerativa ocular, característica de la tercera edad.
La guayaba es también rica en ácido fólico, una vitamina del grupo B que ayuda a combatir el mal aliento causado por la gingivitis, una enfermedad de las encías, además esta vitamina es la indicada durante el embarazo para prevenir malformaciones fetales, como es el caso de la columna bífida.