Los puerros, como el ajo y la cebolla pertenecen a la familia de los vegetales llamados allium, los cuales contienen compuestos beneficiosos para la salud bien documentados hoy por la ciencia y utilizados desde hace miles de años por la medicina tradicional. Los puerros contienen cantidades importantes del flavonoide conocido como “kaempferol”, que ha demostrado repetidamente capacidad para proteger los revestimientos de los vasos sanguíneos y sanar los daños, incluidos los daños causados por el exceso de moléculas reactivas de oxígeno.
Uno de los mecanismos implicados en esta protección de los vasos sanguíneos es el aumento de la producción de óxido nítrico, un gas natural que ayuda a dilatar y relajar los vasos sanguíneos, evitando la hipertensión, así como también disminuir la producción de dimetilarginina asimétrica, una sustancia que bloquea la producción del oxido nítrico, favorable para la salud arterial y por consiguiente cardíaca.
Los puerros poseen una importante concentración de la vitamina B folato, que es una de las formas bioactivas (5-metiltetrahidrofolato) que está presente en toda la planta y es cardioprotector natural.
El ácido fólico es una vitamina del complejo B clave para apoyar nuestro sistema cardiovascular, porque ayuda a mantener los niveles de homocisteína en equilibrio, ya que si son excesivamente altos representan un factor de riesgo para muchas enfermedades cardiovasculares y ataques cardíacos.
Las concentraciones de polifenoles antioxidantes son verdaderamente impresionantes en los puerros y estos juegan un papel directo en la protección del daño oxidativo sobre nuestros vasos y células sanguíneas.
Por desgracia los puerros han recibido menos atención por parte de la investigación científica en relación con sus familiares, los ajos y las cebollas, por esta razón hay menos documentación de sus beneficios para la salud, sin embargo los estudios recientes dan habida cuenta de su contenido sustancial de polifenoles, incluyendo cantidades notables de kaempferol, por lo cual brindan apoyo para muchos problemas de salud relacionados con el estrés oxidativo y la inflamación crónica de bajo nivel, ambas condiciones que afectan la salud cardiovascular.