Ya sea para la preparación de sopas invernales, como para la preparación de ensaladas en verano, las calabazas combinan con todas las estaciones ofreciendo sus beneficios saludables y por sobre todo bajas calorías durante todo el año, transformándose en uno de los vegetales más consumidos y recomendados por los especialistas en nutrición.
Una taza de zapallo cocido en agua solo tiene 49 calorías y cero de grasas, para tener una relación calórica, la misma porción de camote contienen 249 calorías y de papa 136 calorías respectivamente. Por lo tanto desde el Departamento de Agricultura estadounidense como directrices dietéticas recomienda que los adultos debieran consumir más verduras ricas en nutrientes y bajas en grasa, como la calabaza.
Los carbohidratos y proteínas contenidas en un taza de calabaza cocida equivalen a 2 gramos de proteína y 12 gramos de hidratos de carbono, pero además las calabazas son ricas en fibra dietética, a razón de 3 gramos por taza y teniendo en cuenta que los organismos de salud recomiendan a las mujeres el consumo de 25 gramos de fibra por día y para los hombres 38 gramos, la calabaza puede ayudar considerablemente en dicho aporte.
Debido a su bajo contenido de carbohidratos, la calabaza sustituye con creces a una porción de patatas para aquellas personas que siguen una dieta baja en carbohidratos, ya que una taza de papas contiene más de 31 gramos de hidratos de carbono y 1 taza de batata contiene más de 58 gramos, para tener en cuenta.
Las calabazas poseen un alto contenido de vitaminas y minerales, tales como; vitamina A, vitaminas del complejo B, vitamina C, fósforo, potasio, calcio y hierro. Además la calabaza cocida es una buena fuente de beta-caroteno, un antioxidante que ha demostrado tener la capacidad de reducir el riesgo a desarrollar enfermedades cardiovasculares y ciertos tipos de cáncer.