Primero es necesario recalcar que para una adecuada pérdida de peso es imprescindible realizar una dieta equilibrada. En cualquier dieta variada y saludable no deben faltar las verduras y las hortalizas, ya que poseen numerosos beneficios para la salud y ayudan en gran medida a bajar esos kilos que nos sobran.
De todas las verduras y hortalizas podemos destacar el apio ya que únicamente aporta 16 calorías por cada 100 gramos y su composición es en un 95 % agua, además, contiene aceites esenciales con acción depurativa y diurética, ayuda a controlar el apetito y mejora los procesos digestivos así como el tránsito intestinal.
El apio se puede tomar de muchas formas, ya sea añadirlo a un guiso o a un plato elaborado, en un licuado vegetal o bien en una potente forma: el té de apio.
La infusión o té de apio es una forma de tomar este alimento especialmente indicado para aquellas personas que por problemas intestinales no pudieran tomar el apio crudo.
Necesitarás un tallo de apio y un litro de agua.
Lava y corta el apio, paralelamente pon el agua a hervir en un cazo. Cuando el agua llegue a su punto de ebullición añade el apio y deja hirviendo durante aproximadamente 5 minutos.
Pasado este tiempo apaga el fuego, tapa el cazo y deja reposar la mezcla como mínimo 3 minutos. Después sólo quedará colar y el té estará listo para tomar.
Puedes tomarlo caliente o frio y si lo prefieres también puedes endulzarlo con estevia.
Se pueden tomar 3 tazas al día, pero no por periodos de tiempo indefinidos, como sucede siempre que tomamos algún concentrado o complemento nutricional debemos establecer periodos de descanso.
No obstante, si quieres adelgazar, el té de apio para perder peso es una de las mejores ayudas.