Nuestros pulmones trabajan incansablemente cada segundo de nuestra vida realizando alrededor de 25.000 inhalaciones y exhalaciones diarias, por ello preocuparnos por la salud pulmonar es una prioridad y los alimentos pueden ayudarnos a potenciarla o mejorarla.
Al respirar la contaminación o el humo de tabaco puede dañar a los pulmones y según los informes de The National Lung Health, los pulmones necesitan una amplia variedad de vitaminas, minerales y antioxidantes para mantenerse saludables, por lo cual debemos elegir los alimentos más ricos en estos nutrientes para beneficiar la salud pulmonar.
Aquí les brindamos algunos de los alimentos más importantes para mantener o recuperar la salud de nuestros pulmones, a saber:
Los contaminantes pueden aumentar la producción de radicales libres en los pulmones y estas moléculas deformes son capaces de destruir el tejido pulmonar sano. La única defensa del cuerpo contra los radicales libres son los antioxidantes naturales que encontramos en los alimentos, destacando entre ellos los arándanos, cuya riqueza en antioxidantes es muy alta y por ello pueden ser capaces de compensar parcialmente el daño pulmonar causado por el tabaquismo.
Los arándanos son ricos en vitamina C, uno de los antioxidantes naturales más poderosos que puede mejorar la función pulmonar en general, según informa la BBC.
La vitamina D es un nutriente esencial para la salud pulmonar y una investigación publicada en el "American Journal of Clinical Nutrition", comparó los niveles de vitamina D en sangre con la tasa de infección respiratoria de un grupo de 800 hombres, todos ellos presentaron bajos niveles de vitamina D y aquellos con niveles muy bajos tuvieron una probabilidad del 60 por ciento mayor a padecer una infección de las vías respiratorias, comparados con aquellos que tenían niveles moderados.
La fuente principal de vitamina D es la exposición a la luz solar, pero también los hongos son una de las fuentes de alimentos muy ricos en vitamina D. Otras fuentes de vitamina D incluyen cereales fortificados, leche y pescado.
El asma es una enfermedad respiratoria crónica que afecta comúnmente a los niños, sin embargo muchos adultos también la sufren, representando una condición inflamatoria de los pulmones. Un artículo publicado en la "Revista de la American College of Nutrition", informa que los ácidos grasos omega-3 contenidos principalmente en los pescados como el salmón (que lo posee en niveles muy altos) puede reducir significativamente la inflamación pulmonar en pacientes con asma.
Otras fuentes de estos ácidos grasos saludables omega-3 son: los mariscos, semillas de lino, nueces, aceite extra virgen de oliva y legumbres.