Existen varios tipos de herpes pero dos virus son los principales; el HSV-1 y HSV-2. El primero es responsable de las infecciones de herpes que afectan a la boca y los labios, mientras que el VHS-2 ataca principalmente el área genital y si bien tanto uno como otro pueden causar malestar, no suelen dar lugar a complicaciones graves de salud en individuos sanos.
Una dieta especifica junto al tratamiento de la infección provocada por el herpes simple debe incluir alimentos ricos en un aminoácido conocido como “lisina”, que se encuentra presente en las carnes rojas, aves, pescado y productos lácteos. Pero otro aminoácido conocido como “arginina” causa el efecto contrario o sea que puede empeorar la condición, por ello deben evitarse los alimentos que lo contengan, como por ejemplo las nueces, los guisantes, el chocolate y ciertos cereales.
Otros alimentos a evitar cuando se padece de herpes simple son: el alcohol, refrescos, alimentos procesados, azúcar, carbohidratos refinados, productos de harina blanca y café, ya que favorecen los procesos inflamatorios.
Un alimento muy indicado para luchar contra el herpes simple es el yogur natural, ya que posee un alto contenido de lisina e históricamente la medicina natural lo ha utilizado con mucho éxito a través del tiempo, tratando condiciones de salud relacionadas.
Según los estudios llevados a cabo sobre el yogurt han demostrado que tiene la capacidad de tratar infecciones vaginales por hongos recurrentes, así como también daños provocado por radicales libres, disfunción tiroidea e inflamación artrítica, ya que el yogur es una excelente fuente de yodo, calcio, fósforo y riboflavina.
Para tener muy en cuenta; en la mayoría de los casos de herpes se ha demostrado que una combinación de tratamiento natural y alopático brinda los mejores resultados, así como los alimentos mencionados estimulan los mecanismos naturales de auto curación del organismo.