Las propiedades medicinales del humagón son fundamentalmente tres:
Los usos populares del humagón son más extensos y aprovechan sus propiedades antiinflamatorias no sólo para el dolor en las articulaciones sino también para aliviar las molestias asociadas a infecciones urinarias, problemas bucales, vulvovaginitis, problemas de bronquios e incluso sobrepeso. En este último punto cabe señalar que el humagón no presenta propiedades adelgazantes propiamente dichas y la pérdida de peso que ocasiona se debe únicamente a su efecto diurético. Este mismo efecto diurético hace al humagón una buena opción para tratar problemas de hipertensión arterial.
El humagón se emplea en forma de infusión, extracto fluido, extracto seco o tintura.
Esta planta solo está contraindicada para personas alérgicas al propio humagón o a plantas de la misma familia. No se recomienda su uso durante el embarazo y el periodo de lactancia por carecer de datos sobre su inocuidad.