La diverticulitis representa una enfermedad grave que se genera cuando aparecen pequeñas bolsas abultadas en el revestimiento del colon, las cuales se infectan o inflaman, afectando la funcionalidad del colon, por ello la dieta puede agravarla y un ejemplo de ello son los alimentos crudos.
Cuando la diverticulitis es activa el consejo profesional es evitar los alimentos crudos, debido a que pueden incrementar o causar irritación a la inflamación del colon, por lo cual evitar estos alimentos resulta la mejor opción y entre ellos además de verduras y frutas también se encuentran las semillas, frutos secos y los granos enteros.
Los alimentos crudos son ricos en fibra al igual que los integrales y ésta estimula las contracciones intestinales lo cual conduce a la diarrea, un síntoma característico y peligroso de la enfermedad, además los alimentos crudos incrementan el gas intestinal, otra situación que empeora el cuadro.
Una dieta de alimentos líquidos ayuda a curar la diverticulitis, ya que son más fáciles de digerir y absorber, por lo tanto no irrita el colon debido a que la absorción se lleva a cabo en el estómago y no contienen ningún residuo o fibra que excite la función intestinal y un ejemplo de alimentos líquidos incluyen a los jugos de fruta sin pulpa, caldos claros, gelatina café o té, sin agregados.
A medida que el cuadro de la inflamación provocada por la diverticulitis comienza a ceder, el profesional evaluará si se puede incorporar gradualmente una dieta baja en fibra para proporcionar energía y nutrientes durante la recuperación, de acuerdo con la Clínica Mayo. Entre los alimentos bajos en fibra se incluyen; el arroz blanco, pasta, pan blanco, leche, pescado, carne, cereales bajos en fibra para el desayuno y el jugo de fruta sin pulpa.
Recuerda que: Sólo se debe reanudar el consumo de alimentos crudos y otros alimentos ricos en fibra a la dieta una vez que la diverticulitis este curada, y en este caso suelen ser muy recomendados los alimentos crudos como ensaladas y frutas frescas, ya que pueden ayudar a prevenir futuros ataques de diverticulitis.