A partir de una gran variedad de plantas sus propiedades curativas se han confeccionado muchos de los remedios caseros que desde tiempos remotos ayudan a curar y prevenir naturalmente todo tipo de enfermedades o dolencias. Las sustancias de estas mismas plantas medicinales son utilizadas hoy para confeccionar los medicamentos actuales.. Para la Salud de los Riñones, Diente de León, Beneficios saludables de la Pimienta Negra , y otros.
El diente de león es una de las hierbas medicinales más populares a través de la historia, y que entre su gran cantidad de virtudes saludables destacan los beneficios que brinda a nivel renal en particular.
La Pimienta Negra forman parte del arte culinario desde las épocas más antiguas, pero también la medicina antigua la utilizó para tratar distintas dolencias, por sus propiedades medicinales.
La Grosellas son unas bayas con grandes propiedades medicinales por su aporte de antioxidantes, flavonoides, vitaminas y otros elementos favorables para el cuidado de la salud.
La cúrcuma es la especia que da color al famoso curry, un conjunto de especias de origen hindú, pero más allá de dar sabor a las comidas, también es capaz de luchar contra el cáncer.
El agracejo es un arbusto del que se aprovecha casi todo: raíces y corteza son utilizadas en tratamientos naturales, las flores permiten elaborar una miel muy particular, y con los frutos se realizan confituras y bebidas refrescantes.
El Altramuz es una legumbre apta para el consumo humano muy saludable, que en algunos países, como es el caso de China, se aprecia mucho por sus propiedades medicinales.
La rosa mosqueta es una planta ampliamente extendida por todo el mundo y muy recomendada para estimular la cicatrización de los tejidos afectados por las úlceras gastrointestinales.
Para tratar la inflamación generada por algunas enfermedades crónicas, la opción de usar como tratamiento natural alimentos antiinflamatorios suele ser la mejor, ya que se minimizan los efectos secundarios.
El insomnio es un mal de la época que nos afecta a todos en un momento u otro de nuestra vida y que muchas veces no solo se traduce como la imposibilidad de conciliar el sueño, sino que además puede manifestarse despertándonos en la mitad de la noche, para luego no poder volver a dormirnos.