Mantener el colesterol dentro de los niveles recomendados en muy importante para prevenir graves problemas como enfermedades cardiovasculares e infartos, y para ello usar algún remedio natural para bajar el colesterol malo es ideal.
Existen alimentos poco conocidos que revisten características de verdaderos súper alimentos por que suponen un aporte nutricional muy importante para la salud.
El Cartílago de tiburón: es un eficaz antiinflamatorio utilizado para tratar problemas articulares, regenera el cartílago y lubrica la articulación. Además resulta ser un potente inmunoestimulante entre otras propiedades.
El bicarbonato de se ha utilizado por siglos como remedio casero, sin embargo se debe tener cuidado con su uso cuando existan problemas o enfermedades renales, ya que puede agravar la condición.
En la búsqueda de mejorar la digestión muchas personas aprovechan una amplia gama de tratamientos naturales que se basan en cambios de la dieta diaria, a la que suelen incorpora ciertos alimentos como es el caso del limón y las semillas de lino.
La avena y el aceite de linaza son dos recursos naturales para bajar el colesterol malo. El colesterol es una sustancia indispensable para la salud de las arterias pero solo en equilibrio, cuando sucede lo contrario se vuelve un enemigo de la salud.
Se han descubierto maravillosas propiedades de la membrana de la cáscara de huevo al aportar todos los nutrientes que las articulaciones requieren para prevenir los procesos inflamatorios tanto por lesiones físicas, como por enfermedades como la Artritis.
Los cálculos en la vesícula popularmente conocidos como “piedras de la vesícula” tienen su origen en una alimentación inadecuada, que encuentran un aliado en remedios naturales, como es el caso del vinagre de sidra de manzana.
El Bocio puede manifestarse por distintas causas, entre las cuales existen ciertos alimentos perjudiciales que pueden generarlo cuando se consume en exceso, como la linaza o las semillas de lino.
Uno de los síntomas más característicos de la menopausia son los sofocos o también conocidos como los populares calores, cuyo origen son los cambios hormonales de este ciclo femenino, que puede encontrar alivio en el consumo del polen de abejas.